Juan Reyna es esposo y padre de dos niños, de 9 y 13 años, que llevan casi un año esperando su liberación.
Sus hijos se han perdido ocasiones especiales y días festivos con su padre, y si no actuamos ahora, se verán obligados a pasar su primera Navidad sin él.
Juan ha estado detenido desde enero, cuando la Patrulla Fronteriza lo detuvo y lo arrestó en camino a su trabajo. Los abogados de RAÍCES han batallado por meses para sacar a Juan de detención. Ahora, debemos alzar la voz sobre su caso para que pueda llegar a casa para la Navidad. Juan no es una amenaza al público ni una prioridad para deportación; ICE debe liberarlo inmediatamente.
No es justo que la esposa de Juan, Guadalupe, tenga que criar a sus hijos sola. Los hijos de Juan no deberían tener que pasar por el trauma de estar separados de su padre durante ya casi un año. Sus estudios ya están siendo afectados por la detención de su padre.
Juan Reyna tiene raíces profundas en Texas: su esposa, hijos, trabajo y hogar. Es un trabajador de la construcción, un trabajador esencial, y gracias a personas como él, todos tenemos techos bajo los cuales dormir. Su esposa, Guadalupe, tiene problemas médicos graves, incluso una afección pulmonar. Ella y los niños están sufriendo inmensamente sin Juan.
¿Escribirás una carta insistiendo que ICE libere a Juan Reyna ahora?